La zona trasera del vehículo es un espacio pensado como zona de atención sanitaria para emergencias, servicios preventivos o asistencia en actividades de riesgo previsible o gran concentración de asistentes. No está pensada como ambulancia para trasladar pacientes, sino como sitio para hacer una primera atención hasta la llegada de un recurso ambulancia para tratamiento y evacuación.
En uno de esos laterales se puede montar un hospital de campaña, con suministro eléctrico y de oxígeno desde el vehículo, con capacidad para 4 pacientes, pensado tanto para incidentes de múltiples víctimas como para la cobertura de servicios preventivos con múltiples asistencias.
El otro permite su uso como zona de atención a pacientes leves en incidentes de múltiples víctimas, asistencia socio-sanitaria o zona de agrupamiento de personas afectadas (por ejemplo, en desalojos) o como zona de descanso resguardada para los intervinientes en una emergencia de larga duración.
El otro vehículo presentado es una ambulancia de Soporte Vital Básico Medicalizable que como rasgo más distintivo tiene el estar equipado con tracción integral 4x4 acoplable y reducción de marchas, lo que le permite poder moverse en condiciones adversas (por ejemplo, nevadas).
Está equipada del material habitual en ambulancias de Soporte Vital Básico, pero se puede emplear como vehículo medicalizado con la simple presencia de personal facultativo, al incluir desfibrilador, respirador automático y bomba volumétrica de infusión.
En cualquier caso más importante que las características técnicas de los vehículos es el hecho de que han sido posibles gracias al apoyo de la ciudadanía donostiarra a Cruz Roja, que lleva presente en nuestra ciudad desde 1870, y que gracias a ellos podremos prestar más y mejores servicios a esa ciudadanía...